¿Quién Fue El Padre Pío? (Conoce su Historia)
En el año de 1887 un 25 de mayo, nace en una pequeña provincia de Benevento – Italia llamada Pietrelcina, Francisco Forgione a quien en el ámbito eclesiástico se le conoce como el Padre Pío de Pietrelcina.
Familia de escasos recursos, pero muy religiosa, Horacio Forgione era el nombre del padre y María Giuseppa el nombre de su madre. Trabajaban la tierra y cuando su hijo Francisco nace, ellos lo encomiendan a San Francisco de Asís, santo por el cual lleva ese nombre.
Desde niño tenía un corazón noble, sensible y con una espiritualidad especial que iluminaba todo su ser. A los 5 años tuvo su primera visita espiritual, el Sagrado Corazón de Jesús, quien posa sus manos sobre su cabeza y le hace la promesa de que a partir de ese momento sería un fiel seguidor.
¿Quién es El Padre Pío?
Se puede decir que la iglesia Santa María de los Ángeles, fue su segundo hogar porque una gran parte de su vida se pasaba en sus alrededores, además, recibió los sacramentos del bautismo, comunión, confirmación, y fue ahí mismo que tuvo lugar la primera aparición espiritual que recibió.
Cuando niño se mostraba tímido y callado, era distinto a los demás chicos de su edad, le gustaba estar por mucho tiempo en la iglesia incluso después de las misas.
Su noviciado empezó a los 16 años al ser aceptado en Morcone por los frailes capuchinos, para 1916 en la catedral de Benevento fue ordenado sacerdote, de ahí pasó a la provincia de Foggia y se instaló en el convento de San Giovanni Rotondo, en donde permaneció hasta su fallecimiento.
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Milagros del Padre Pío
Los milagros que se atribuyeron al Padre Pío, fueron a través de la intercesión y aunque por su propia iglesia se pusieron alguna vez en duda, después de realizadas las investigaciones eclesiásticas se pudieron confirmar, por lo que en el año 2000 el Padre Pío fue canonizado.
Aquí la narración de algunos de sus milagros más conocidos …
1. El Milagro de la Monja Lucía
Lucía era una monja que estaba padeciendo de diabetes desde hacía ya un tiempo y estaba en una etapa severa, para tratar de ayudarla se le pidió que bebiera mucha agua con el fin de ayudarla a sentir alivio.
Pero de un momento a otro dejó de tener sed y mandó llamar a la madre superiora, diciendo que en ese momento tenía que ir a rezar a la capilla.
Debido a su gravedad, la madre superiora pensó que su deseo por ir a rezar se debía a que estaba llegando a el momento de su partida. La hermana Lucía de hecho confirmaba este pensamiento cuando le dice… <<Madre, el Padre Pío vino a visitarme, moriré muy pronto y me dijo que no sería curada por ningún médico>>.
Con la ayuda de dos hermanas fue a la capilla y en ningún momento pidió que se le diera agua, lo cual era extremadamente raro, pues debido a la diabetes estaba siempre solicitando que se le diera agua para beber.
Cuando termina sus oraciones, regresa a su pequeño cuarto, por un momento parecía que se iba a desmayar, entonces las hermanas llaman al cura y se intentó darle agua de beber, pero ella simplemente no la aceptó.
De un momento a otro y con una gran sonrisa abrió los ojos, se sentó en la cama y lo siguiente que dijo fue… <<Me ha hablado el Padre Pío y me ha dicho que estoy curada, me dijo, levántate y ven a verme para agradecer juntos a Dios Padre>>.
Así lo hizo, acompañada de dos hermanas fue al monasterio a visitar al Padre Pío, el que al verla llegar le aseguró que la esperaba para bendecirla. Estos hechos sucedieron el 17 de junio de 1946.
2. El Milagro a Gaspare di Prazzo
Este hombre estaba padeciendo de fiebre mediterránea la cual se caracteriza por episodios febriles frecuentes en los que además tienen que soportar inflamación de los revestimientos del tórax, articulaciones, el abdomen, etc.
Una persona del sexo femenino que tenía conocimiento del Padre Pío y de las curaciones por intercesión que tanto se popularizaron, decidió hablarle de él al Sr. Gaspare di Prazzo, diciéndole que lo invoque por ayuda para que lo cure y también le proporcionó una imagen del Padre.
El Sr. Gaspare di Prazzo, al tener en sus manos la imagen del Padre Pío, la besó de inmediato rogándole su alivio, algunos días pasaron y de pronto una tarde el Sr. Gaspare, le habla a su mujer y le da indicaciones precisas de que no dejara entrar a alguien, pues el Padre Pío iba a llegar y no quería que nadie más lo viera.
Por la noche, cuando ya sólo estaba la mujer cuidándolo, el Sr. Gaspare, le dice que apague las luces porque ya estaba por llegar el Padre Pío y no quería que nadie más le viera. Así lo hizo la mujer, apagó las luces, de pronto, empieza a hablar diciendo… <<Padre Pío, ¿ha venido a sanarme?, le doy las gracias, ponga sus manos por todo mi cuerpo, ya no soporto más y no quiero dejar sola a mi esposa>>.
La esposa lo escuchaba y no veía a nadie a su lado, pero ciertamente creía que el Padre Pío estaba ahí junto a su marido, estaba un poco asustada, pero rezaba con gran fervor también al Padre Pío.
Habían pasado ya algún tiempo cuando la mujer le pregunta a su esposo si podía prender la luz, a lo que el Sr Gaspare respondió… <<Aún no, pues el Padre Pío aún no se va, está aquí conmigo todavía>>.
Después de pasados diez minutos más, el esposo le dijo que ya podía encender las luces, pues el Padre ya había salido. Al momento que la esposa prendió la luz, llegaron la hermana de Gaspare y el médico que lo atendía, Gaspare se veía bien, tenía los ojos brillosos y suspiraba sin parar, refería sentirse mejor y exclamó…
<<Estaba en una linda iglesia, y el Padre Pío estaba celebrando la misa, entonces yo me encontraba de rodillas, apareció el Espíritu Santo representado por una paloma que se posaba sobre el altar.
Cuando la misa terminó, fui hacia el Padre quien me dijo… Pon tu fe en Dios, pero primero has de confesar y de ahora en adelante no debes dejar de hacerlo por ningún motivo.
Me dio mucha sed y pedí al Padre Pío que me diera agua y me llevó hasta un manantial donde llené una botella con rica agua fresca, con profundo dolor lo bebía ardiendo aún de fiebre. Cuando terminé de beber aquella agua, percibí un olor dulce como vainilla, y el Padre Pío se alejó”.
Una vez terminó de relatar este cuento, el médico lo revisó y notó que había un cambio muy notorio en el paciente, la fiebre disminuyó y al siguiente día simplemente ya no tenía fiebre y lo mejor es que nunca más la volvió a padecer.
Desde luego el Sr. Gaspare no dejó de confesarse tal como se lo pidió el Padre Pío y siempre lleva con él su imagen.
3. El Milagro a Gemma
Justo el 24 de diciembre del año 1939 nace Gemma, lamentablemente sus ojos no pudieron ver la luz del día debido a que estaba completamente ciega. Después de que su madre la llevara con varios especialistas se determinó que Gemma no poseía pupilas y por eso no podía ver. Una condición que además no tenía solución.
Su familia era religiosa, y constantemente la llevaban a la iglesia y rezaron a María, rezaban para tratar de que Dios concediera el milagro de que la niña pudiera ver.
Eran parientes de una joven monja que sabía del Padre Pío y sus milagrosas intercesiones para sanación, le dijo a la familia que lo buscaran. Era un rayo de esperanza para toda la familia y así lo hicieron.
La monja escribió al Padre Pío contándole de la pequeña Gemma, y le pedía que intercediera por ella, una noche, en un sueño, la monja ve al Padre Pío quien le pregunta… << ¿Quién es esa Gemma para quienes todos están ofreciendo sus oraciones?>>. Y, ahí en el mismo sueño, la monja le presentó a la pequeña, él extendió su mano para hacer la señal de la cruz en sus ojos.
Un día después recibe contestación del Padre Pío, en una carta que decía… << Hija querida, ten la seguridad de que oraré por Gemma, con mis mejores deseos>>.
Y de inmediato se comunicó con la familia para que fueran de inmediato a ver al Padre Pío. Ocho años después la pequeña viajó con su abuela para el encuentro con el Padre Pío, durante el viaje la abuela rezaba para que sucediera el milagro, y mientras estaban viajando por fin sucede el milagro que estaban esperando.
Gemma, le dice a la abuela que veía el mar y un barco y la sorpresa fue enorme, estaban tan sorprendidos que empezaron a orar, no obstante, la abuela estaba preocupada, porque quería ver al Padre Pío.
Cuando llegan a la presencia del Padre Pío, éste ve a Gemma y la llama incluso antes de que se la presentara, ella se confesó, pero olvidó decirle sobre su ceguera. El Padre Pío, con su mano tocó sus ojos nuevamente haciendo la señal de la cruz.
Después siguió la abuela para confesarse y ella pidió para Gemma la gracia ya que a Gemma se le había olvidado, y el Padre Pío dijo a la abuela… <<Hija, ¿tienes fe?, nadie debe llorar porque ya la pequeña puede ver y de hecho sabes que así es>>
La abuela entendió que el Padre se refería a los sucesos del viaje cuando Gemma dijo que podía ver el mar y el barco, supo que Dios a través del Padre Pío había hecho el milagro para Gemma.
Era un hecho sin precedentes y muy difícil de explicar para la ciencia, de hecho, no lo podían explicar, la vieron médicos, pero ninguno supo explicarlo.
La lista de milagros del Padre Pío sigue y sigue, pero son estos los más reconocidos o los que más se popularizaron.
Los Estigmas del Padre Pío
Aunque se sabía que desde pequeño poseía un alma totalmente espiritual y que tuvo muchas apariciones divinas los estigmas fueron el hecho que de alguna manera le dio la fama, estigmas que eran visibles en su cuerpo y que mantuvo por espacio de 50 años.
La aparición de los estigmas fue narrada por el mismo Padre Pío y lo decía de la siguiente manera…
<< En 1918 una mañana del 20 de septiembre, estaba en oración de la liturgia, me estaba elevando en una oración mucho más sutil, cuando una luz brillante apareció, era Jesús, que derramaba sangre por todos lados, parecían rayos lacerantes que se desplazaban de su cuerpo herido al mío, y se empezaron a hacer las heridas en mis manos, pies y mi costado.
De pronto regreso en mí, ya estaba en el piso con las llagas de las cuales sin cesar brotaba sangre, sentía que moría y de alguna manera así hubiera sido de no ser porque Dios vino a sostener mi corazón que palpitaba fuertemente dentro de mi pecho.
Fui a mi celda prácticamente a gatas y tomé un descanso mientras rezaba, vi mis llagas mientras elevaba cantos de agradecimiento a Dios>>.
No se hizo esperar la noticia sobre los estigmas del Padre Pío, y en menos de lo que se imaginan, decenas de personas llegaban hasta San Giovanni Rotondo para verlo, le besaban las manos y se confesaban asistiendo a sus misas.
En la historia de la iglesia el Padre Pío fue el primer estigmatizado. Es de importancia mencionar que los estigmas del Padre Pío, desaparecieron unos días antes de que él falleciera, y no dejaron cicatriz alguna que pudiera servir como referencia, solamente los testimonios de fotografías, y de personas que lo conocieron pueden certificar el hecho.
Profecías del Padre Pío
Entre todos los dones que el Padre Pío tenía, uno de ellos era realmente especial, se trata de la profecía, pero lo más sorprendente es que era el mismo Jesús quien revelaba al Padre Pío sobre ciertos sucesos que tendrán lugar en algún momento.
Por ejemplo, Jesús le habló sobre el final de los tiempos de la humanidad, en el año de 1950 el Padre Pío envía una carta al vaticano en donde detalló todo lo que se le reveló sobre este suceso, con la intención de prevenir a todos los seres humanos sobre el inminente castigo de Dios a toda la humanidad.
Aquí algunos de los fragmentos más importantes de la carta…
1.- Un Mundo en Ruinas
Debido a que la humanidad se ha perdido en un mundo lleno de violencia, el mundo se volverá exactamente igual una verdadera catástrofe.
2.- Un Jardín Envenenado
Cuando el mundo se confió al hombre era como un lindo jardín, pero se han encargado de llenarlo de sustancias venenosas y nada es bueno ya para intentar purificarlo, será necesario trabajar a profundidad y esa ayuda vendrá solamente del cielo.
3.- Tres Días de Total Oscuridad
Serán tres días en donde toda la humanidad permanecerá en sus casas y no deberán hablar con nadie que esté fuera de ellas, ni pueden abrir sus puertas escuchen lo que escuchen. Los que logren sobrevivir, volverán a ver la luz, pero también habrá quien no la volverán a ver jamás.
4.- La Gente Querrá Correr
Muchas personas se asustarán y correrán sin dirección, sin rumbo y sin importar a donde corran perecerán.
5.- Temblará la Tierra
Se producirá un terremoto tal como el movimiento de la serpiente, se sentirá en todas partes y caerán muchas piedras y también habrá hombres que morirán.
6.- La Pelea Por Un Pedazo de Pan Será Inminente
Habrá saqueos, destrucción, asaltos, pobre de quien no tenga una vela para los días de la oscuridad o que no tenga agua para beber y que tampoco tenga provisiones para al menos 3 meses.
7.- El Amor Al Prójimo no Existirá Más
Si no eres capaz de amar a quienes comparten contigo la mesa, ¿cómo podría Jesús amarte?, Los hombres que serán perdonados por Dios serán los de corazón, más no los de ciencia.
8.- Se Desencadenará un Rayo
Dios está desesperado pues no sabe cómo hacer comprender a la humanidad que se está perdiendo, por eso, su rayo de justicia será enviado sin piedad.
9.- Muerte Llegará en Diversas Formas
Muchos perecerán en los ríos, otros serán quemados, envenenados, pero los que tengan un corazón puro los mantendré cerca de mí.
Aclara que no habrá aviso alguno, que Dios vendrá como un vil ladrón para hacer justicia en el mundo que Él creó.
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