Historia de la Catedral de Notre Dame París
La iglesia de Nuestra Señora de París o Catedral de Notre Dame, es una de las más destacadas de Francia en el arte gótico, es de hecho uno de los símbolos con mayor popularidad en la Ciudad De París.
La Catedral de Notre Dame, está orientada hacia el oeste en su fachada y frente a la plaza de Notre Dame, ya más de 800 años de historia han pasado por sus muros. Sin duda es uno de los sitios que más turistas atrae en París.
De Europa es una de las edificaciones más hermosas de estilo gótico, vamos pues a conocer muchas más cosas interesantes de la Catedral de Notre Dame.
¿Quién Construyó la Catedral de Notre Dame?

La Catedral de Notre Dame fue construida no por una sino varias personas profesionales en la arquitectura, por ejemplo, Pierre Montreuil, Jean Ravy o Pierre de Chelles, Jean de Chelles.
También participó Jacques el Chevallier quien se encargo de la creación colosal de los ventanales que adornan el interior de la iglesia. No obstante, a través del tiempo sufrió algunas modificaciones, de las cuales, la más importante es la que se hizo con el estilo Barroco, que era el estilo del momento durante el siglo XVII.
Fue el Obispo Maurice de Sully, el que tuvo la iniciativa de construir esta Catedral entre los años 1163 y 1240.
Catedral de Notre Dame Características
No se puede excluir prácticamente nada de la Catedral de Notre Dame cuando se da un paseo por ella, porque toda ella es extraordinaria, sin embargo, resaltan algunos aspectos de la iglesia que pueden ser aún más fascinantes. Estos aspectos o características importantes son:
1. El órgano
Al paso del tiempo el órgano de la catedral fue mejorando y es completamente funcional a la fecha de hoy, es considerado como uno de los más bellos en el mundo.
2. La fachada Occidental
Sin duda la más asombrosa de toda la iglesia, pues en esas tres puertas están escondidos una gran cantidad de detalles que son fácil de admirar a partir del año 2000, ya que se realizó una limpieza profunda de éstas que por cierto llevo un tiempo aproximado de diez años.
Catedral de Notre Dame Arquitectura
La Catedral de Notre Dame sufrió muchos daños en el tiempo de la Revolución Francesa, por lo que algunas décadas más adelante, cuando la época del Romanticismo estaba en su auge, se toma la decisión de iniciar una restauración muy ambiciosa.
Los profesionales de la arquitectura que se encargaron de este proyecto fueron: Eugene Viollet-le-Duc y Jean-Baptiste Lassus, quienes incluyeron, por ejemplo, las tan populares gárgolas.
Cuenta con arcos apuntados y arbotantes, que permiten la estabilidad de la edificación, también posee una bóveda nervada, dos torres se levantan en la fachada principal, con 3 grandes puertas, una gran saliente con esculturas y un espectacular rosetón coronando el pórtico principal, que por cierto es el más importante y lo llaman <<El Portal del Juicio Final>>.
En ese portal se pueden observar esculturas que representan la resurrección de los muertos, también se puede observar una balanza sostenida por un ángel en donde pesa pecados y virtudes, también se aprecian demonios que arrastran a las almas pecadoras.
Consagrados a la Vírgen María y a Santa Ana, su madre están los otros dos portales laterales.
Por arriba de los portales se pueden observar un total de 28 estatuas, las cuales miden 3,5 metros de alto, y éstas representan a los reyes de Judea que anticiparon la llegada de Jesús.
Por arriba del rosetón del que hablamos se encuentra en la puerta principal, podemos observar una fila de columnas y después dos torres que son albergan los campanarios.
Catedral de Notre Dame Gárgolas
Gargoille, es una palabra francesa de donde se deriva la palabra gárgola, la cual significa <<garganta>>, las cuales se usaban como desagües, pero también fueron creadas por escultores medievales que intentaron mostrar a la humanidad con ellas, sobre la existencia del mundo imperfecto y no solamente como esculturas decorativas.
Normalmente estas esculturas representan la mezcla entre animales y hombres o demonios y monstruos, hay quienes dicen que las gárgolas, simbolizaban antiguos seres malignos que huían de la iglesia y otros dicen que sirven como espantapájaros para los espíritus malignos.
Las tan famosas gárgolas que se observan en lo alto de la Catedral de Notre Dame, no solo son esculturas de adorno, tienen una función muy especial, y es la de conservar en buen estado los muros de la misma.
La función de las gárgolas consiste en enviar al vacío el agua de lluvia que corre sobre los tejados de la catedral, evitando así que el agua, al correr de forma excesiva a través de los muros sean dañados.
Pero la protección sobre la Catedral de Notre Dame ofrecida por las gárgolas va mucho más allá, ya que simbólicamente también protegen de los demonios, y de todas las fuerzas malignas que rondan la Catedral, y los ahuyentan de sus muros santificados.
Y como no podrían ahuyentar a todo ser maligno si tienen un aspecto sorprendentemente horroroso, algo que no pudo pasar desapercibido ante artistas que sin pensarlo las han incluido en sus relatos.
Muestra de ello es, Víctor Hugo, quien concede un importante papel a las gárgolas en su novela Nuestra Señora de París, debido a su fealdad tan visible, pero sin dejar de lado esa función de salvadoras, son el contraste del jorobado de Notre Dame (Quasimodo).
Las gárgolas son entonces esos guardianes callados y solitarios, que retan a la maldad humana, las cruzadas y las inclemencias, desde hace ya algunos siglos atrás.
Detrás de las gárgolas hay un sinfín de leyendas y una de las más conocidas es la de Juana de Arco… Cuenta la leyenda que cuando Juana de Arco era quemada en la hoguera, las gárgolas tomaron vida y destruyeron toda la ciudad bajo la oscuridad de la noche. Monstruos con alas y cuernos observaban desde lo alto la muerte de un ser inocente y decidieron hacerle venganza.
Por la mañana siguiente, se dice que cientos de cadáveres aparecieron por todas las calles de París.
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